Más de la mitad de los 400 millones de euros de ayudas para la renovación de flotas se destinan al achatarramiento

Los exigentes requisitos y objetivos demasiado concretos de la línea de ayudas del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (MITMS) para la renovación de las flotas de camiones y autobuses han provocado que más de la mitad de la partida de 400 millones destinada a tal fin se haya destinado al achatarramiento de vehículos antiguos, mientras que el presupuesto destinado a la compra de camiones o autobuses libres o de bajas emisiones sea menor.

Según los datos del propio Ministerio de Transportes, las solicitudes para el achatarramiento de vehículos pesados en el marco de esta línea de ayudas suman un total de 256,8 millones de euros, frente a los 214 millones de euros que se han destinado para la compra de camiones y autobuses de bajas emisiones. Esto implica que además de superarse las solicitudes por 80 millones de euros respecto al presupuesto inicial -con la partida a instalar puntos de recarga-, el 53,5% de las mismas han sido sólo de achatarramiento.

Cifras que no satisfacen al Ministerio, pero del todo previsibles por las condiciones de la línea de ayudas. Al final, el achatarramiento de vehículos antiguos está siendo la única vía para dar buen uso a estas subvenciones, ya que comprar camiones o autobuses eléctricos, ya que aún la oferta es reducida y con precios inaccesibles para gran parte de la profesión. A esto hay que sumar que un buen número de solicitudes de achatarramiento la llevan a cabo transportistas que tienen prevista su jubilación y que ante la perspectiva de no poder acceder a las ayudas al abandono de la actividad optan por esta solución.

Las subvenciones ascendían a 25.000 euros por vehículo matriculado antes del 1 de enero de 2019, limitado a 30 vehículos por empresa o 1 por persona física, sin tener obligación de comprar un vehículo nuevo a cambio. Y aquí está la clave, ya que aun con subvención los camiones y autobuses eléctricos siguen siendo muy caros. Además, como es lógico, se han adquirido más autobuses (1.535) que camiones (688), por la poca oferta existente en este último segmento.

Fernando Sancho

Redactor especializado en movilidad, transporte de mercancías por carretera y las actividades anexas al sector.

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