Francia ha sido uno de los primeros países en llevar a cabo la transposición a su ordenamiento jurídico de la Directiva europea que regula el desplazamiento de conductores. Sin embargo, países como Alemania están en proceso de definir el importe de las sanciones a conductores y empresa que no lleven a cabo el registro en el tacógrafo de cruce de fronteras. Una circunstancia que todavía no tienen interiorizada los chóferes profesionales a partir de los datos que han sido revelados por la BAG.

Según las primeras estimaciones de la policía de tráfico de Alemania, en la frontera entre el país germano y Bélgica sólo uno de cada tres conductores profesionales se detiene en el primer estacionamiento tras cruzar la frontera para anotar esta situación en el tacógrafo. El resto de chóferes continúan la marcha sin detenerse, por lo que ignoran la nueva obligación de apuntar el cruce de fronteras en el tacógrafo. Una situación que BAG pretende atajar, aunque de momento se está adoptando una política de ‘transición’

De hecho, BAG está mirando para otro lado ante esta situación, aunque muy pronto dejará de ser así. Al final, el Ejecutivo alemán está preparando ya el texto que sirva para la transposición de la Directiva europea y fije la cuantía de las sanciones que se podrán imponer a conductores y empresas de transporte por no cumplir con la obligación de señalar en el tacógrafo el cruce de fronteras nada más producirse esta circunstancia.

En este aspecto, las multas para los chóferes que no marquen el cambio de país en el sistema del tacógrafo serán de 125 a 250 euros, mientras que para las empresas de transporte las multas irán de 375 a 750 euros. El importe final dependerá de la evaluación de la infracción por parte de los servicios de inspección y control, ya que la omisión de esta obligación se puede considera una negligencia o un incumplimiento intencional de la ley.