Los problemas del modelo de transporte de mercancías por carretera español son evidentes y los propios protagonistas del sector así lo reconoce. Sin embargo, nunca está de más tener una visión externa como la que ofrece el estudio realizado por la CNR, organismo francés que tiene el objetivo de analizar el modelo de funcionamiento de los sistemas y modelos de transporte de mercancías por carretera, tanto en Francia como en el resto de Europa. Y España sale mal parada en este análisis de su transporte por carretera.

Aunque son muchos los puntos destacados de este estudio, quizá el más relevante es el que hace referencia a los 55 convenios colectivos que regulan el transporte de mercancías por carretera en España. Un modelo con un convenio colectivo por provincia que se aleja de forma considerable de los modelos existentes en toda Europa. El estudio analiza no sólo el número de complicaciones derivadas de esta situación, sino las desigualdades que se generan dentro del sector en el desarrollo de la actividad de una provincia a otra.

De los 55 convenios colectivos existentes, 30 actualmente están en vigor. Una cifra inferior que sin embargo no consigue subsanar las diferencias salariales entre provincias. Así por ejemplo, el convenio colectivo de Vizcaya (País Vasco) marca un salario bruto anual para un conductor profesional de 27.498 euros, mientras que este baremo en el convenio colectivo de Ourense es de 13.034 euros, menos de la mitad. Una diferencia enorme que pone en entredicho la eficacia de este modelo respecto a apuesta de convenios nacionales como las que se plantean en Países Bajos.

El estudio ha querido analizar a su vez los costes por kilómetro que puede tener una empresa de transporte o un profesional autónomo afincado en Cataluña y el País Vasco en el desarrollo de servicios internacionales. La elección de estas dos Comunidades no ha sido casual, ya que en cierta medida reflejan estas grandes diferencias que se dan en el sector. En Cataluña se ha dado una inflación del 9,7% en el coste de los conductores por el aumento de los mínimos legales en los convenios colectivos tanto de sueldo básico bruto como de dietas de viaje.

Dejando a un lado el complejo y a veces inexplicable modelo de transportes de mercancías por carretera con 55 convenidos diferentes, el estudio del CNR recoge que el 89% del cabotaje del transporte español se realiza en Francia. La cifra de servicios de transportistas españoles en suelo galo se ha triplicado en 11 años, alcanzando los 2.617 millones de toneladas-kilómetro. De hecho, este cabotaje supone el 3,5% del transporte internacional español, casi un 1,2% de la actividad total del sector.