Los costes laborales y los salarios en España han marcado nuevos máximos en el tercer trimestre del año, una realidad que impacta de lleno en sectores intensivos en mano de obra como el transporte de mercancías por carretera.

Evolución récord de los costes laborales en el tercer trimestre

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el coste laboral medio por trabajador y mes alcanzó una cifra récord en el tercer trimestre, situándose en niveles que no se veían desde hace más de 25 años. Este indicador incluye tanto las remuneraciones salariales como las cotizaciones obligatorias a la Seguridad Social y otros costes asociados al empleo.

El análisis interanual refleja un incremento significativo de los costes laborales totales, impulsado principalmente por la subida de los salarios y por el aumento de las cotizaciones. Para empresas del transporte de mercancías por carretera, donde el peso del componente laboral es muy elevado, este repunte supone un encarecimiento claro del coste por kilómetro recorrido y por tonelada transportada.

Salarios al alza: impacto directo en el transporte por carretera

En cuanto al componente puramente salarial, la remuneración media por trabajador también ha alcanzado máximos en este tercer trimestre. El salario medio ha registrado una subida notable frente al mismo periodo del año anterior, en un contexto marcado por la inflación y por la presión al alza en las revisiones salariales.

Esto se traduce en mayores costes por conductor contratado, tanto en rutas nacionales como internacionales. La escasez de conductores profesionales y la necesidad de retener talento en un mercado muy tensionado están reforzando esta tendencia, obligando a muchas compañías a revisar tablas salariales, pluses por kilómetro, dietas y otros complementos.

Importancia de las cotizaciones y otros costes laborales

El informe también pone de relieve que los costes no salariales, como las cotizaciones a la Seguridad Social, han aumentado. Las cotizaciones sociales y las indemnizaciones por despido, junto con otros pagos obligatorios, elevan de forma considerable el coste real de cada puesto de trabajo. Esto significa que cualquier subida en estos conceptos repercute de inmediato en la estructura de precios y en la rentabilidad de los contratos a medio y largo plazo.

Diferencias sectoriales y particularidades del transporte

Aunque los datos del INE abarcan el conjunto de la economía, el transporte y almacenamiento figura entre los sectores más sensibles a la evolución de los costes laborales. La elevada intensidad de personal, la dependencia del tiempo de conducción y descanso, y la regulación específica del sector hacen que cualquier variación en salarios y cotizaciones tenga un efecto multiplicador.

Frente a otros sectores con mayor automatización, el transporte de mercancías por carretera sigue apoyándose de forma esencial en el factor humano. Esto explica que, cuando los salarios marcan máximos históricos, el impacto sobre las cuentas de explotación sea especialmente relevante, obligándo a replantear estrategias de planificación de rutas, utilización de flotas y negociación de tarifas con cargadores y operadores logísticos.

Repercusiones en precios y competitividad del sector

Con este escenario de costes laborales en cifras récord en 25 años, muchas empresas de transporte se ven abocadas a trasladar parte de este incremento a sus tarifas para mantener sus márgenes operativos. Esta dinámica puede derivar en un encarecimiento generalizado de los servicios de transporte, afectando a la cadena de suministro y a la competitividad frente a otros modos o frente a operadores de países con menores costes laborales.