La Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas Portuarios (FENATPORT) ha manifestado públicamente su firme rechazo a la aprobación del aumento de la masa máxima autorizada (MMA) hasta las 46 toneladas para el transporte intermodal, una decisión que consideran desequilibrada, carente de garantías y potencialmente perjudicial para el sector del transporte portuario.
Desde la federación se critica que esta medida haya salido adelante sin establecer un sistema obligatorio de control y trazabilidad que permita identificar, con plena seguridad, si una operación cumple efectivamente con los requisitos legales del transporte intermodal.
Ausencia de trazabilidad: riesgo de fraude y abuso
Tal como establece la normativa europea, para que una operación sea considerada intermodal, el tramo por carretera no puede superar los 150 kilómetros en línea recta, y no debe existir ninguna estación ferroviaria intermodal entre el punto de origen o destino y la terminal intermodal.
“En ausencia de un sistema de trazabilidad fiable y obligatorio, se abre la puerta al fraude y al uso abusivo de la excepción de peso, con consecuencias negativas para los transportistas que operan legalmente”, advierten desde FENATPORT.
La federación recuerda que lleva desde 2018 oponiéndose activamente a esta excepción, argumentando que no solo no es necesaria, sino que introduce un exceso de carga injustificado. Durante estos años, FENATPORT ha participado en las reuniones del Comité Nacional de Transporte con la Dirección General de Transportes y ha presentado alegaciones formales ante la DGT para advertir de los riesgos que implica la norma.
Un agravio para el transporte portuario
Lejos de promover una intermodalidad eficiente, desde FENATPORT consideran que esta medida perjudica gravemente al transporte por carretera, y especialmente a los autónomos y pequeñas empresas que operan en los entornos portuarios.
La decisión se ha adoptado sin el respaldo de las asociaciones representativas del transporte portuario, generando un clima de inseguridad jurídica y conflictividad en los puertos, donde ya comienzan a producirse tensiones derivadas de las diversas interpretaciones sobre la aplicación de esta normativa.
Exigen control desde el inicio de la operación
Frente a esta situación, FENATPORT solicita que el Ministerio de Transportes, Puertos del Estado y las Autoridades Portuarias intervengan de forma inmediata y trabajen en la implantación de un sistema de control transparente, obligatorio y plenamente trazable. El objetivo es que desde la misma orden de transporte se pueda saber si se trata o no de una operación intermodal legítima.
“Sin esta garantía, la norma corre el riesgo de convertirse en una vía abierta para la competencia desleal y las malas prácticas”, señalan desde la federación.
Impacto económico directo
Además de los riesgos operativos, FENATPORT advierte del impacto económico que supondrá este aumento de Masas y Dimensiones para el transporte por carretera. El incremento de costes logísticos deberá necesariamente verse reflejado en una revisión de las tarifas, instando a una adecuación corresponsable del precio del transporte para evitar que la carga financiera recaiga exclusivamente sobre los transportistas.
Con esta posición firme, FENATPORT reafirma su compromiso con un modelo de transporte justo, legal y sostenible, en defensa del sector portuario y sus profesionales.