El único adjetivo calificativo que se tendría que dar a toda esta panda de indocumentados que rigen los destinos del sector es el de inconscientes: cuando casi toda España está bajo las adversas condiciones climatológicas, lo primero que se hace por parte de las autoridades de tráfico es BLOQUEAR los camiones sin importar quién va arriba de ellos. No es para menos que para indignarse.

Nadie se preocupa por las necesidades de esos seres humanos, que no camioneros, a los que apartan en cualquier lugar y punto, sin recursos de ningún tipo, con la excusa baladí de encubrir, las autoridades de tráfico y las correspondientes consejerías, sus incompetencias que no falta de medios. No hay mejor fórmula que parar los camiones de más de 7,5 tns., y punto. Ahí, arrinconados.

Por el contrario, no hay otra voz, de la parte que sea, que tan sólo proceda a protestar por tales medidas y circunstancias de los conductores. Ni las asociaciones de transportistas, ni los que dicen representar a los trabajadores del sector.

Y luego dicen que no hay conductores. ¡Cómo los va a haber si los tratan como a perros! Perdón, ni eso, porque si ese trato se lo dan a los perros, las asociaciones animalistas ya hubieran puesto el grito en el cielo.

Por cierto los sindicatos ni están ni se les espera.